Las cuatro de la madrugada

Merece la pena «escuchar» este poema recitado publicado en el blog poeteSSen

Hora de la noche al día.
Hora de un costado al otro.
Hora para treintañeros.

Hora acicalada para el canto del gallo.
Hora en que la tierra niega nuestros nombres.
Hora en que el viento sopla desde los astros extintos.
Hora y-si-tras-de-nosotros-no-quedara-nada.

Hora vacía.
Sorda, estéril.
Fondo de todas las horas.

Nadie se siente bien a las cuatro de la madrugada.
Si las hormigas se sienten bien a las cuatro de la madrugada,
habrá que felicitarlas. Y que lleguen las cinco,
si es que tenemos que seguir viviendo.

 

Polonia (1923 – 2012)

9 comentarios sobre “Las cuatro de la madrugada

  1. Qué grande es esa mujer, por favor… la delicia y la envidia (sana) de todo poeta. Siempre dije que es la mejor de todos; al menos de los últimos cien años y este poema lo confirma con sencillez y firmeza.
    Gracias por compartirlo.

    Un fuerte abrazo.

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  2. ¡Muchas gracias MJBeristain por apreciar nuestra declamación de este precioso poema de una premio Nobel tan entrañable!
    Ojalá seas una asidua «oyente» de nuestro cuaderno y nos des permiso para ser también una inspiradora de nuestros cuentos narrados y poemas recitados, permitiéndonos declamar en un futuro alguno de los tuyos, que tanto nos han gustado.
    Felicidad…

    Le gusta a 1 persona

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