Aunque solo quede
de los abrazos
abismales
el rugir
de invisibles hilos de espuma
desafiando al vacío…
Llámame Otoño
con la piel desgastada
de besos a la espalda
y una lluvia limpia
de salitre
escarchando las pestañas
cada madrugada
Llámame Otoño
con la violencia de la resaca
de las mareas vivas,
que es setiembre
y el mar me lleva
insistentemente
al vértice de tu boca.
@mjberistain
Fotografía El pasajero.com